¿Realmente innova Rolex?

Entre los aficionados, expresiones como «Rolex siempre hace lo mismo», «qué novedades más insulsas» y similares se escuchan con frecuencia. Y la verdad es que puede parecerlo, pero si encaramos el aspecto técnico la cosa resulta bien diferente.

Pero antes, hablemos de lo estético. ¿Por qué Rolex no innova estéticamente? La verdad es que sí lo intenta, pero a pesar de que los aficionados se quejan de la poca variación física de los relojes, cuando la marca lanza un nuevo modelo, el público no responde comprándolo en masa, sino comprando nuevamente los modelos clásicos, los que apenas han variado con el tiempo.

Ejemplo de esto son los Prince, ya que la gente quería el reloj herramienta, no algo elaborado en búsqueda de otra fórmula. Así, los pobres Cellini pasan sin pena ni gloria en el catálogo constantemente.

Otros ejemplos con caja Oyster son el Yacht Master 2 y el Sky Dweller, siendo este segundo más aceptado entre el público, aunque sin llegar a ser súper ventas.

Muchas de las marcas, durante sus primeros años, buscan la identidad estética y, cuando la encuentran, la explotan. En relojería, esto se puede apreciar a menudo con prácticamente cualquier marca: Patek con su Nautilus, AP con el Royal Oak, Omega y el Speedmaster… Si pensamos en relojes de este rango de precios, veremos que todos tienen este patrón.

Pero, ¿qué pasa cuando los relojes cambian mucho estéticamente entre generaciones? Pues básicamente que se ven desfasados, y no hablo de que tengan un aire vintage, sino de no verse bien. Al final el resultado de no variarlo tanto es preservar la identidad de marca y proteger la temporalidad del reloj para el consumidor. Esto puede parecer raro, pues cualquier otra cosa que compremos parecerá estar hecha para durarnos una temporada o años y hacer que, posteriormente, tengamos la necesidad de cambiarla.

Todo esto solo para introducir jajaja, pero ya entramos a nivel técnico, que es donde podemos ver la otra cara de la moneda.

A nivel técnico puede parecer lo mismo, que Rolex hace algo y hasta pasados unos años no lanza nada nuevo. Pero la verdad es que entre medias no paran y siempre están tratando de mejorar calibres y traer nuevas funcionalidades. Sin embargo seguro que ahora estás pensando <<¿Ah sí? Cuéntame más que yo no veo mucha innovación>>.

Y no te falta razón ya que el problema de Rolex es que es una compañía muy hermética en todo y no publicita estas cosas. Pero para que entendamos a lo que me refiero, vamos a tomar un ejemplo.

Podemos encontrar en otras marcas relojes antimagnéticos como IWC Ingenieur o catálogo prácticamente completo, como el de Omega, que certifican todos sus calibres con METAS y ofrecen una resistencia de 15.000 gauss.

Por parte de Rolex teníamos el Milgauss como reloj antimagnético, que toma su nombre de precisamente resistir 1000 gauss en la década de 1950. Actualmente ya no contamos con este reloj en catálogo pero de esa época solo conservaba el nombre, porque la resistencia magnética ha evolucionado. ¿Pero cuánto? Porque en la página de Rolex no aparece nada y por internet no hay apenas información.

Para conocer más debemos acudir a las patentes, en las que podemos ver que los nuevos calibres con el Parachrom del que hemos oído hablar en alguna ocasión y sobre todo del volante, del que se conoce mucho menos. El volante y sus contrapesos están realizados de una aleación de cobre y berilio que tiene propiedades antitéticas y antimagnéticas.

Este duo de Parachrom y volante que trabajan en conjunto manteniendo el ritmo, gracias a la inercia, son capaces de soportar hasta 25.000 gauss. Nada mal si tenemos en cuenta que este es el estándar para la marca en todos los relojes superando por mucho lo que certifica Metas.

Sin embargo, aquí sale el espíritu innovador de la marca, en la que superar por mucho el estándar  líder del sector podría hacer que la compañía o departamento de I+D se relajara, pero en realidad esto les ha parecido insuficiente y han decidido seguir trabajando en una nueva aleación para el volante a base de latón sin plomo.

Esta nueva aleación ya presentada a patente, es capaz de soportar hasta 40.000 gauss antes de que los campos magnéticos sean capaces de afectar al funcionamiento del reloj.

Al estar ya presentada la patente y Rolex lista para producir, ¿Esto quiere decir que dentro de poco veremos en catálogo un nuevo Milgauss capaz de resistir los 40.000 gauss? Y ¿Cuál es el siguiente paso de Rolex? Quien sabe, pero con algo entre manos andan.

Que las cosas no las veamos no quiere decir que no estén ocurriendo, y en este caso hablo de Rolex como empresa que a pesar de que el público no lo perciba, sigue innovando, pero vuelve a leer el artículo y cambia Rolex por otra marca que consideres, como Omega con su Spirate, Oris con el calibre 400, Patek y su actualización de calibre Worldtime, IWC en la búsqueda de nuevos materiales… Quizás esto cambie nuestra perspectiva sobre la innovación de las marcas.

Anterior
Anterior

Pruebas locas que no veremos más en la industria.

Siguiente
Siguiente

Los relojes artesanos por excelencia