Yema: la manufactura francesa

Hace unas semanas tuve el placer de recibir tres relojes de la marca francesa Yema para revisión. Sin tener un prejuicio sobre las piezas, la impresión que me causaron los relojes fue muy positiva.

 

Lo que más diferencia a Yema actualmente son sus calibres manufactura, hechos en Morteau. De hecho, sus calibres usan la denominación «CMM», que significa Calibre Manufacture Morteau en francés. He podido ver dos ejemplos: el CMM.20, con micro rotor, y el CMM.10, con rotor convencional y volante a las 12. Sorprende la precisión que certifica la marca (no certificada cronómetro), de -3/+5 en el CMM.10 y de -3/+7 en el CMM.20. Uno de los interrogantes que me gustaría disipar es el de cómo se comporta el CMM.20 con baja reserva de marcha, ya que es sabido que uno de los principales problemas de los calibres con micro rotor de nuevo desarrollo es el de la pérdida de precisión con baja carga. De todas maneras, ambos ofrecen una reserva de marcha de 70 horas gracias a su gran barrilete, que permite llegar a ella aún funcionando a 4 hercios.

 

En el Yema Skin Diver Slim y en el Yema Superman Slim, algo a destacar es el uso del zafiro. Lo encotramos en tres partes: la primera, y más común, es el cristal, de doble cúpula de 2mm de grosor, que se suma a los 10mm de la caja ofreciendo un grosor más que contenido. La segunda, en la trasera, que es vista, algo muy destacable teniendo en cuenta que el reloj es estanco a 30 bares, o lo que es lo mismo, 300 metros. Habrá argumentos en contra de las traseras vistas en relojes herramienta como este, pero siendo los calibres manufactura uno de los puntos fuertes de la marca, entiendo la jugada. Por último, encontramos zafiro en los biseles, material que le da un aspecto distinto a la cerámica que uno podría esperar encontrarse en un reloj de estas especificaciones. En mi canal de YouTube, Fariñas, podréis encontrar una revisión completa de estos modelos a partir del viernes 26 de julio.

 

Por otra parte, el tercer reloj que pude revisar es el Yema Marine Nationale CMM.10. Este reloj de 1 690 € ofrece grandes especificaciones en un precio contenido si tenemos en cuenta el calibre manufactura que lleva. 30 bares de estanqueidad, 70 horas de reserva, -3/+5s de desviación, sin fecha, Superluminova grado A, zafiro doble cúpula de 2.2mm y unas proporciones excelentes: 39mm de diámetro, 46mm de asa a asa y 13.2mm de grosor (de los cuales, repito, 2.2mm son de cristal). También ofrece un bisel de zafiro, al igual que los compañeros de catálogo de los que hemos hablado antes.

 

Algo que diferencia al Marine Nationale de los Slim es el brazalete. Estos últimos portan el brazalete denominado por la marca como «Scales Slim», una especie de granos de arroz que, siendo estéticamente superlativo, tiene, en mi opinión, un fallo de construcción que lo hace inferior al brazalete de acero que encontramos, por ejemplo, en el Marine Nationale. Cabe destacar que ambos estilos de brazalete tienen un sistema extensible para buceo práctico y bien hecho. Un pequeño detalle que tiene que ver con la practicidad de cara a las inmersiones y que solamente encontramos en el Superman, es el bloqueo mecánico del bisel, que es giratorio unidireccional. Este sistema de bloqueo añade seguridad al bisel en la inmersión y fue patentado por la marca en 1967.

 

En líneas generales, veo a Yema como una marca en trayectoria ascendente, y si no aumenta en exceso sus precios, como una de las marcas a batir en su rango, sin duda alguna.

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